Protocolo diagnóstico, terapéutico y de seguimiento del paciente con enfermedad hepática grasa no alcohólica
Tipo de material: ArtículoIdioma: Español Descripción: páginas 215-219Tema(s): ENFERMEDAD DEL HÍGADO GRASO NO ALCOHÓLICO | HÍGADO GRASO | FIBROSIS | ESTEATOHEPATITIS NO ALCOHÓLICARecursos en línea: Haga clic para acceso en línea En: Medicine: Programa sistemático de actualización en medicina y protocolos de práctica clínicaResumen: En el proceso diagnóstico de todo paciente con enfermedad hepática grasa no alcohólica (EHGNA) se deben realizar tres evaluaciones: establecer el diagnóstico de hígado graso no alcohólico (HGNA) o de esteatohepatitis no alcohólica (NASH); establecer el grado de fibrosis (principal factor pronóstico global) y completar el estudio de los factores de riesgo vascular (que condicionarán el pronóstico general a medio y largo plazo en la mayoría de los pacientes). El tratamiento es la pérdida de peso, idealmente mediante cambios en el estilo de vida a expensas de una dieta hipocalórica y ejercicio. Si este abordaje fracasa, la cirugía bariátrica es una alternativa. Aún no hay fármacos aprobados específicamente para tratar la enfermedad. El seguimiento debe realizarse acorde a la gravedad de la hepatopatía y a las comorbilidades metabólicas, implicando a especialistas de atención primaria, digestivo, endocrinología y cardiología cuando sea preciso.Tipo de ítem | Ubicación actual | Colección | Signatura | Info Vol | Estado | Fecha de vencimiento | Código de barras |
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Publicación Periódica | Biblioteca Central ESSALUD | Colección General | MED (Navegar estantería) | v.13 N°4(2020) | Disponible | MED004 |
En el proceso diagnóstico de todo paciente con enfermedad hepática grasa no alcohólica (EHGNA) se deben realizar tres evaluaciones: establecer el diagnóstico de hígado graso no alcohólico (HGNA) o de esteatohepatitis no alcohólica (NASH); establecer el grado de fibrosis (principal factor pronóstico global) y completar el estudio de los factores de riesgo vascular (que condicionarán el pronóstico general a medio y largo plazo en la mayoría de los pacientes). El tratamiento es la pérdida de peso, idealmente mediante cambios en el estilo de vida a expensas de una dieta hipocalórica y ejercicio. Si este abordaje fracasa, la cirugía bariátrica es una alternativa. Aún no hay fármacos aprobados específicamente para tratar la enfermedad. El seguimiento debe realizarse acorde a la gravedad de la hepatopatía y a las comorbilidades metabólicas, implicando a especialistas de atención primaria, digestivo, endocrinología y cardiología cuando sea preciso.