Hacia una pandemia de salud mental
Tipo de material: ArtículoIdioma: Español Descripción: páginas 176-177Tema(s): ENFERMERAS Y ENFERMEROS | AGOTAMIENTO PROFESIONAL | ESTRÉS LABORAL | UNIDADES DE CUIDADOS INTENSIVOS | PANDEMIAS | INFECCIONES POR CORONAVIRUSRecursos en línea: Haga clic para acceso en línea En: Enfermería intensivaResumen: La actual pandemia por COVID-19 ha provocado un gran aumento de la presión asistencial y las cargas de trabajo en las unidades de cuidados intensivos (UCI). Ya en condiciones habituales, estas unidades exigen una mayor dotación de enfermeras debido a la complejidad de los tratamientos y los cuidados administrados a los pacientes. Durante la pandemia COVID-19, esta situación se agravó debido al aumento de pacientes en situación crítica, añadiéndose a la complejidad del paciente crítico la necesidad de aislamiento del paciente, con la consecuente utilización de equipos de protección individual. Administrar atención a los pacientes con COVID-19 ha exacerbado el estrés y el agotamiento de las enfermeras, ya que las incertidumbres son constantes, los desafíos infinitos y los resultados poco satisfactorios. Por tanto, podríamos estar en riesgo de una epidemia de salud mental entre los profesionales sanitarios tras la pandemia. Se espera que la pandemia COVID-19 sirva como una llamada de atención, para que las autoridades brinden más énfasis en la asignación de recursos financieros a los servicios de salud y programas de apoyo a las enfermeras.Tipo de ítem | Ubicación actual | Colección | Signatura | Info Vol | Copia número | Estado | Fecha de vencimiento | Código de barras |
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Publicación Periódica | Biblioteca Central ESSALUD | Colección General | ENFINT (Navegar estantería) | v.32 N°3(2021) | 1 | Disponible | ENFINT001 |
La actual pandemia por COVID-19 ha provocado un gran aumento de la presión asistencial y las cargas de trabajo en las unidades de cuidados intensivos (UCI). Ya en condiciones habituales, estas unidades exigen una mayor dotación de enfermeras debido a la complejidad de los tratamientos y los cuidados administrados a los pacientes. Durante la pandemia COVID-19, esta situación se agravó debido al aumento de pacientes en situación crítica, añadiéndose a la complejidad del paciente crítico la necesidad de aislamiento del paciente, con la consecuente utilización de equipos de protección individual. Administrar atención a los pacientes con COVID-19 ha exacerbado el estrés y el agotamiento de las enfermeras, ya que las incertidumbres son constantes, los desafíos infinitos y los resultados poco satisfactorios. Por tanto, podríamos estar en riesgo de una epidemia de salud mental entre los profesionales sanitarios tras la pandemia. Se espera que la pandemia COVID-19 sirva como una llamada de atención, para que las autoridades brinden más énfasis en la asignación de recursos financieros a los servicios de salud y programas de apoyo a las enfermeras.