Benabdallah Sebbagh, R.

Protocolo diagnóstico del dolor torácico con sospecha de origen esofágico - páginas 52-56

El dolor torácico no cardiológico es prevalente en la población y su principal causa es la enfermedad por reflujo gastroesofágico. Para una correcta aproximación diagnóstica, es fundamental evaluar la presencia de criterios de alarma: disfagia, odinofagia, anemia, ferropenia, síndrome constitucional, sangrado, vómitos. En su ausencia, se recomienda una prueba de supresión ácida sin estudios complementarios previos. En su presencia, una endoscopia digestiva alta es fundamental y permite observar lesiones orgánicas. La pH-metría es el patrón de oro para detectar reflujo patológico y la manometría de alta resolución para evaluar trastornos motores. Ante un estudio normal, hay que sospechar trastornos funcionales esofágicos como el dolor torácico funcional y la hipersensibilidad al reflujo.


REFLUJO GASTROESOFÁGICO
DOLOR EN EL PECHO
MANOMETRÍA
MONITORIZACIÓN DEL PH ESOFÁGICO