La cefalea tipo tensión es la más prevalente a nivel mundial, pudiendo clasificarse en función de su frecuencia en episódica y crónica. Dadas las características del dolor, puede simular otro tipo de cefaleas primarias o incluso secundarias, por lo que es fundamental realizar una adecuada anamnesis y exploración y, en caso de precisarlo, determinadas pruebas complementarias para establecer un correcto diagnóstico. Respecto a la exploración, es fundamental realizar un fondo de ojo, así como analizar si existe presencia de puntos hipersensibles (tender points) o de puntos gatillo miofasciales (trigger points) que a su vez pueden tratarse. Dentro de las comorbilidades más frecuentes de este tipo de cefalea se encuentran la patología psiquiátrica, las alteraciones del sueño u otras entidades que cursan con dolor crónico como la fibromialgia. Dependiendo de la frecuencia de los días de dolor, los pacientes requerirán solo tratamiento sintomático y medidas no farmacológicas, o bien añadir también medicación preventiva para lograr su control, siendo la amitriptilina el fármaco de primera elección.
CEFALEA DE TIPO TENSIONAL TÉCNICAS Y PROCEDIMIENTOS DIAGNÓSTICOS DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL