Protocolo de manejo clínico del status epiléptico

Por: Álvarez Bravo, G [Autor]Colaborador(es): Monteiro, G. Carvalho | Hernández Cristobal, J [Autores]Tipo de material: ArtículoArtículoIdioma: Español Descripción: páginas 4253-4256Tema(s): EPILEPSIA | ANTICONVULSIVANTES | BENZODIAZEPINAS | EPILEPSIA REFRACTARIA En: MedicineResumen: El status epiléptico es una emergencia neurológica potencialmente mortal. Se conoce como estado epiléptico cuando la actividad convulsiva se prolonga por más de 5 minutos o cuando no hay recuperación de un adecuado nivel de conciencia entre crisis. Dada la gravedad del estado epiléptico, su manejo debe ser integral y exhaustivo, con medidas de soporte ventilatorio y hemodinámico, además de la terapia farmacológica. Los fármacos antiepilépticos deben ser cuidadosamente escogidos y dosificados para obtener una adecuada respuesta terapéutica y evitar efectos adversos que también pueden poner en riesgo la vida del paciente. Las benzodiazepinas como lorazepam o diazepam siguen siendo la primera línea farmacológica del status epiléptico. En casos de intolerancia o fracaso terapéutico con benzodiazepinas, se deben utilizar otros antiepilépticos. En casos de refractariedad, es necesario utilizar anestésicos como tiopental, propofol y/o midazolam.
Etiquetas de esta biblioteca: No hay etiquetas de esta biblioteca para este título. Ingresar para agregar etiquetas.
    Valoración media: 0.0 (0 votos)
Tipo de ítem Ubicación actual Colección Signatura Info Vol Copia número Estado Fecha de vencimiento Código de barras
Publicación Periódica Publicación Periódica Biblioteca Central ESSALUD
Colección General MED (Navegar estantería) v.12 N°72(2019) 1 Disponible MED013

El status epiléptico es una emergencia neurológica potencialmente mortal. Se conoce como estado epiléptico cuando la actividad convulsiva se prolonga por más de 5 minutos o cuando no hay recuperación de un adecuado nivel de conciencia entre crisis. Dada la gravedad del estado epiléptico, su manejo debe ser integral y exhaustivo, con medidas de soporte ventilatorio y hemodinámico, además de la terapia farmacológica. Los fármacos antiepilépticos deben ser cuidadosamente escogidos y dosificados para obtener una adecuada respuesta terapéutica y evitar efectos adversos que también pueden poner en riesgo la vida del paciente. Las benzodiazepinas como lorazepam o diazepam siguen siendo la primera línea farmacológica del status epiléptico. En casos de intolerancia o fracaso terapéutico con benzodiazepinas, se deben utilizar otros antiepilépticos. En casos de refractariedad, es necesario utilizar anestésicos como tiopental, propofol y/o midazolam.