Valor de Villa, J.R.

Cirrosis hepática - páginas 539-549

La cirrosis hepática es una enfermedad muy prevalente a nivel mundial, asociada a una importante morbimortalidad derivada de sus complicaciones: descompensaciones agudas y hepatocarcinoma. En su etiología están implicadas causas diversas como el consumo crónico perjudicial de alcohol, infecciones víricas (virus de hepatitis B o C) o la enfermedad hepática grasa no alcohólica. Todas ellas provocan un daño del parénquima con fenómenos de inflamación y reparación anómalos que conducen finalmente al desarrollo de fibrosis y nódulos de regeneración que se traducen en el desarrollo de hipertensión portal e insuficiencia hepática. Fenómenos como la inflamación sistémica y la disfunción inmune asociada a la cirrosis, así como la alteración en el eje hígado-intestino, serán clave en su evolución. El proceso diagnóstico irá encaminado a identificar las causas de la enfermedad y evaluar el grado de fibrosis e hipertensión portal que determinarán el pronóstico de la enfermedad en los diferentes estadios. Las estrategias de manejo, por su parte, se enfocarán en el tratamiento etiológico, prevención/tratamiento de las complicaciones e incluso en el trasplante hepático como tratamiento definitivo. La identificación y tratamiento de los factores de riesgo y diagnóstico precoz de esta enfermedad permitirán en un futuro una mejoría del pronóstico.


CIRROSIS HEPÁTICA
HIPERTENSIÓN PORTAL
DIAGNÓSTICO
TERAPÉUTICA